El olvido es mal consejero

El olvido es mal consejero

He estado unos cuantos días alejado del mundanal ruido…la calma y el sosiego vienen bien para que mis neuronas restablezcan nuevas comunicaciones y produzcan nuevas ideas y de paso “resuciten” algunas viejas ideas, éstas últimas ancladas en el tiempo a la espera de su eclosión y sin las cortapisas de mis “queridos lugareños censores” entretenidos últimamente en la búsqueda de electores dormidos….luego todos juntos volverán a dormir otros cuatro años.

 De lo más a gusto me lo he pasado planificando nuevas creaciones y muchas de ellas, aún sabiendo de su imposibilidad de verse por la ciudad que quiero…….pero los desarrollos para su momento ya están hechos y anotados…antes que las sombras intenten el olvido.

¿Porqué lo vulgar repetitivo es constantemente programado y reprogramado? La respuesta es tan simple como la suma de la comodidad de no buscar nuevas ideas y mantener la cartera llena sin innovar (para eso hay que pensar)…..total el público-ciudadano si no conoce otras historias, tiene que venir una y otra vez a la misma “obra”……para ellos el hombre es un animal de costumbres y se contenta con unas “zanahorias”.

Desde luego que considero al hombre algo más importante y con muchas posibilidades, que las que ciertos gestores piensan con sus juegos programados de y para hamsters en sus ruedas sin fin.

El olvido es mal consejero…solo sirve para tapar y ocultar la ineficacia; pensando que si no se ve, no se habla…si no se habla “eso no ha ocurrido”….y si la presión mediática presiona; siempre se puede hacer un alarde de cinismo encubierto y sin sonrojo como el que podrán ver a continuación.

Salida de la Ciudadela de Pamplona hacia la Vuelta del Castillo fíjese en el círculo rojo que les he puesto y podrán observar una ridícula miniatura de placa.

EL AYUNTAMIENTO Y LA CIUDAD DE PAMPLONA

COMO HOMENAJE A LOS 298 VECINOS

FUSILADOS EN 1936 POR DEFENDER

LA LIBERTAD Y LA JUSTICIA.

Si eso son capaces de hacer con los ciudadanos fusilados por defender la justicia y la libertad…¿Qué no serán capaces de hacer con los ciudadanos vivos que no piensan como ellos?....Tratar de sumirlos en el olvido, tan fácil en su dominio del terruño y tan difícil…en los albores del siglo XXI donde el trabajo y las ideas saltan de continente en continente.

Esta rosa roja es para todos los olvidados de la tierra.