¿Dónde vas?

Mientras sigo con las nuevas ideas y sus resultados, tendrá el lector que esperar un poco a los nuevos aconteceres, pues necesito un poco de calma en la nueva organización y composición presentes. 

Detalle de una foto última

Con lo cual en esta plácida jornada , os he puesto una imagen de Paris, que bien pudiera encontrarse en cualquier otro lugar.

 

Una mañana, la gente camina hacia el trabajo. Una acera por donde paseo, personajes anónimos de un lado para otro …..Nadie presta atención al mundo que le rodea……Pero sí, hay una “personita” que se percata de la presencia del fotógrafo, se gira y le mira. 

El estaba de espaldas aferrado a su madre, pero con “sus otros sentidos” todavía vigentes; descubrió al “capturador del instante”  y le miró girándose.

 

Esta fotografía forma parte de la segunda serie de fotos en Paris y sus gentes, y a ella en su presentación en la AFCN la bauticé en homenaje al protagonista:

Me llevan a la Guardería ¿Dónde vas tú?  Y aquí la veréis con el título: El protagonista.

De París entre muchos y gratos recuerdos, siempre me sorprenderá el afán mostrado por el arte y la cultura, con mis trabajos, que demostraron las visitas escolares por tandas de las diferentes escuelas de maternal, disfrutando con el arte, y yo con estos pequeños artistas y sus preguntas, ellos pudieron ver una de las mayores exposiciones que he preparado: por el “número de obras” que se pudieron ver durante cerca de un mes y las diversas actividades que llevé a buen puerto-según otros dijeron-: Instalación en parque público, junto al taller sobre el mosaico dedicado a los niños, también realizado en espacios públicos :Square Marmottan, cerca del Mercado de las Pulgas en  total sincronía y colaboración con las autoridades. (Nada que ver con las formas de actuación en Pamplona por parte de quienes debieran tener comportamientos no tan anormales y demostrar capacidad frente a la incapacidad )

 –Una forma de acercar el arte a todo tipo de personas- junto a los audiovisuales (2) que se pudieron ver en la sala de exposiciones.

 

PD: Con el candor y la inocencia de la no maldad…la mirada observadora de un niño vivaracho, mientras el resto de personajes camina en su vida, probablemente, los mismos pasos del día a día que les conducen a sus trabajos, ajenos al instante, salvo: Le petit enfant, despierto a un nuevo día.