Es curioso que la mayoría de las personas asimile la palabra
viaje a un mero hecho circunstancial y causal en un determinado tiempo a través
de un medio conocido de transporte físico…..donde al llegar al destino las
gentes son similares y se diferencian por sus costumbres y habla, el paisaje es
otro de los elementos naturales que difiere de un lugar a otro.
El viaje perdió en la mayoría de los casos el concepto de
aventura y de comunicación de antaño, las agencias lo dan todo “masticado y
preparado”, convirtiéndose la belleza de los lugares en un simple decorado…como
la vida del viajero de plástico trasladado de una zona a otra…..sin detenerse y
mucho menos tratar de imaginar los acontecimientos que hubiesen ocurrido para
que él se encuentre en dicho lugar y su vista retengan algunas simples imágenes
en su retina fotográfica. Hoy en día, en las innumerables fotografías digitales
que serán el punto de apoyo para sus particulares recuerdos.
De esas imágenes “souvenirs” tenemos por todas partes, mejor
o peor sacadas, con más luz o menos luz…algunas adquieren un triste encanto al
ser el único testimonio gráfico de lo que quedó de ese lugar tras ser destruido…principalmente
por los bienes gananciales en suma y sigue del “hombre depredador”, que de la
naturaleza, pues ella no entiende de gananciales y es la única que sobrevive en el tiempo al hombre.
Hace ya unos años encontré un local –bar- en el que la
clientela tras sus vacaciones veraniegas mostraba sus viajes realizados en un
tiempo; con diapositivas y hoy en día mediante proyector conectado a un portátil…….y
como banda sonora: normalmente una “chapa” impresionante e insufrible para los que
no nos interesaba lo más mínimo los aburridos soliloquios de la mayoría de
viajeros de plástico.
Conociendo a los dueños del local y tan curiosa costumbre,
decidí apuntarme un día para presentar mi viaje…..Solo tenía que poner de título
el destino (preferí de momento mantenerme en el anonimato) y este título “Mis
viajes por las galaxias”……quedó puesto entre tanto viaje a Grecia, Patagonia,
Moscú, Marruecos,Tailandia…etc.
Como comprenderá el lector los comentarios de los "viajeros
de plástico" no se hicieron esperar al ver escrito en el pizarrón del bar
semejante título de viaje, e imposible de ir con ninguna agencia de viajes
conocida.
Mucho hablaron sobre la posible locura de tal viajero hasta que llegó el día marcado en el calendario….pero
el resultado fue un lleno total…..Solo les dije unas palabras de bienvenida
explicándoles que el viaje comenzaría cuando la música empezara a sonar y
ninguna palabra saldría de mi boca pues el viaje lo harían desde su imaginación………………..Curiosamente
el viaje que les preparara de 25 minutos se les hizo corto, tan corto que
desearon seguir, y cerca de 3 horas su imaginación voló con destino a otros
mundos que jamás hasta entonces habían conocido.
Resultado un viaje con la mente y el pensamiento....
La imaginación es un atributo que no podemos dejar atrás.
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